Edad Media
Son pocas las noticias que nos han llegado sobre la Cartagena de la Alta Edad Media, y además confusas. En el siglo VII Cartagena fue arrasada por el ejército visigodo, quedando la ciudad reducida a escombros.
En el siglo VIII es dominada como el resto de España, por los árabes, tras la derrota de los visigodos en la Batalla de Guadalete.
Del periodo musulmán, pocos vestigios quedan, tan solo los restos de la Alcazaba sobre la que se construyó posteriormente el Castillo de Cartagena o de la Concepción.
En el año 1.245 el ejército castellano puso cerco a la ciudad, con la colaboración de una flota llegada del Cantábrico, logrando su conquista en el verano de este mismo año.
A raíz de la incorporación de Cartagena a la corona de Castilla, se implantan en ella las instituciones castellanas, empezando por el Concejo, el órgano de gobierno municipal. Como disponía el Fuero de Córdoba, concedido por Fernando III a Cartagena, y las posteriores mercedes concedidas por Alfonso X el sabio, con el fin de poblar la ciudad y que sus vecinos realicen la defensa de la misma, como ocurrió con el privilegio rodado de Alfonso X el sabio a Cartagena, concediéndole el FUERO DE TOLEDO. (Fueros y franquezas que tenían los hijosdalgos de Toledo). «…por poblar bien la ciudad de Cartagena y por hacer bien y merced a todos los burgueses y a todos los marineros y a todos los ballesteros de caballo y a los que son moradores y vecinos de la ciudad de Cartagena a los que ahora lo son y a los que sean de aqui en adelante para siempre, jamas, doy y otorgoles a los burgueses que «estdieren» «guiasados» de caballo y de arma, y a los ballesteros de caballo y de armas, y a los ballesteros de caballo y ballesta, y el de caballo que «vala» de treinta maravedis alfonsi arriba, y a los marineros que fueren señores de navios armados o de leños cubiertos, que hayan en la ciudad de Cartagena los fueros y las franqueas que tienen los caballeros y hijosdalgos de Toledo…» (AMC. Armario 1. Caja 4. Nº,7.) (Publicado en: Historia de Cartagena de Ediciones Mediterráneo. Tomo VI Pág. 52. Mu 1986).
Tanto el Rey santo como su hijo el Sabio, se preocuparon por la defensa de Cartagena, pensando el peligro que suponían los mudéjares, la defensa del puerto y la proximidad de la frontera con el reino árabe de Granada. Para ello en varias ocasiones reparan el Castillo de Cartagena, la única obra defensiva de esta plaza. Recordamos que en 1.264, consecuencia de la rebelión de los mudéjares del reino de Murcia, hubo de ser reconquistada y el trazado urbano de Cartagena queda reducido al Castillo para la protección del puerto.
Recuperada este vieja alcazaba árabe convirtiéndola en el castillo de la ciudad. El 19 de noviembre de 1.267 tomó posesión de esta fortaleza el Maestre de la Orden de Santiago.
En el año 1.304 por la sentencia arbitral de Tordesilla se fijaron los límites entre Aragón y Castilla, que erróneamente dejaban bajo el dominio aragonés a Guardamar y Cartagena.
Enmendado este error y recuperada Cartagena para la Corona castellana, como señorío del Infante Juan Manuel, pero volverá a ser realenga en el año 1345.
Durante el reinado de Pedro I (1.350 – 1.369) el Puerto de Cartagena jugó un papel muy importante como base de partida para las armadas que este monarca organizó para sus guerras con Aragón, teniendo en cuenta que en 1.357 Cartagena fue sitiada por los aragoneses.
Bajo el reinado castellano de Enrique III, en 1.375, es ampliado y reforzado el Castillo.
En 1.465 y hasta 1.503, Cartagena vuelve a ser enajenada de la Corona, y pasa a ser un señorío de los Fajardos, en quien también recaía el título de adelantado. Los señores de Cartagena tendrán un delegado – que solía ser el alcaide del Castillo – en el Concejo, el cual presidía sus reuniones, así como un contador o mayordomo, que llevaba las cuentas. (Grandal López, Alfonso.- «La Edad Media».- Manual de Historia de Cartagena.- 1996.- Pág. 157).
Por la sentencia arbitral de Tordesilla, en 1.304, o Tratado de Límites entre Castilla y Aragón, se señaló el cauce del Rio Segura como divisoria entre Castilla y Aragón. Pero Cartagena y Guardamar quedaron en poder de Aragón. Rectificado el error Cartagena pasa a la jurisdicción de Castilla, como señorío del Infante Don Juan Manuel, hasta que en 1.346 pasa a ser realenga, y entre 1.466 y 1.503, fue señorío de los Fajardos.
Durante el reinado de Pedro I, en Castilla (1.350 – 1.369), en Cartagena se produce «una inusitada actividad, al ser su puerto la base de partida de las campañas marítimas de este monarca». Durante este reinado, en 1.357, Cartagena fue sitiada por tropas aragonesas.
Más tarde Enrique III (1.395) amplía y reconstruye el Castillo, y lo cede a la custodia del concejo cartagenero».
Durante toda la Edad Media no hay más fortaleza en Cartagena que el Castillo que por fin, y de forma definitiva, se hace realengo cuando el 5 de Julio de 1.503 muere D. Juan Chacón, señor de Cartagena y yerno de Pedro Fajardo, en Alcalá, y el 24 de Julio de 1.503 la Reina Isabel revocó la merced que le tenía hecha de la ciudad de Cartagena, y tomó posesión, en nombre de la Católica Reina el comendador D. Nicolás de Guevara, por real cedula el 4 de Julio del citado año.
Como resumen de la Edad Media cartagenera, todo el sistema defensivo consistía en el mantenimiento del Castillo para la protección del Puerto.