Medio centenar de socios y simpatizantes de AFORCA nos hemos dado cita esta mañana de domingo en el Monte Roldán, para visitar las posiciones de la antigua batería antiaérea, la de mayor cota de las que defendían Cartagena y su base naval.
La niebla y la amenaza de lluvia condicionó la jornada, que comenzó con el ascenso al monte por libre de los participantes de todas las edades, por diferentes itinerarios, para encontrarnos todos a las 10:30 en la batería.
Nuestro alcaide, Juan Lorenzo Gómez-Vizcaíno Castelló, ilustró la visita con los datos históricos que dieron origen a este emplazamiento artillero, que entró en funcionamiento durante la Segunda República y fue una de las baterías más activas de la Guerra Civil, para repeler las incursiones de la aviación nacional de los sublevados.
Durante la estancia en las posiciones de los antiguos cañones, se empezó a disipar la niebla, y pudimos contemplar las impresionantes vistas que ofrece este mirador hacia el mar, la ciudad y el Campo de Cartagena.
La visita concluyó con la tradicional foto de recuerdo de los asistentes en el peculiar patio de repuestos, que, como el resto de las baterías cartageneras, presentan formas arquitectónicas caprichosas, en este caso que recuerdan al del Parque Güell de Gaudí en Barcelona. Como habitualmente, Antonio García Heredia fue el encargado de fotografiarnos y hacer el reportaje que dejamos junto a esta publicación.